¿Es un proveedor de sabiduría secreta o el redentor del mundo? Los documentos del Nuevo Testamento ofrecen una imagen muy clara de Jesús: él es... el Hijo de Dios resucitado, que redimió a la humanidad a través de su muerte expiatoria en la cruz. Sin embargo, estos no son los únicos textos de historia antigua. Varios así llamados evangelios gnósticos desenterrados durante el siglo veinte, incluyendo el Evangelio de Tomás, representan a Jesús de un modo muy diferente. No tiene que ver con simplemente añadirle algunas nuevas pinceladas o algo de sombreado al retrato tradicional de Jesús; en lugar de ello, se trata de un lienzo totalmente distinto y de una nueva semblanza. Aunque dentro del gnosticismo hay diversidad, el erudito en Nuevo Testamento N.T. Wright dice que los gnósticos históricamente han sostenido cuatro ideas básicas en común: El mundo es malo, este surgió como producto de un creador malvado, la salvación consiste en ser rescatado de él, y el rescate viene a través de un conocimiento secreto, o gnosis, en el griego. Lo que se necesita» dice Wright, es un "revelador" que venga de la esfera del más allá, del mundo espiritual alto y puro, para revelarle a los pocos escogidos el hecho de que tienen dentro de ellos mismos la chispa de la luz, una identidad divina interior escondida en lo profundo ... Para muchos gnósticos, ese revelador es Jesús de Nazaret que, según su perspectiva, no es el salvador que murió por los pecados del mundo, sino más bien el que imparte una sabiduría secreta que difunde la verdad con respecto a la naturaleza divina que hay dentro de cada uno de nosotros. El contraste entre el Jesús bíblico y el gnóstico resulta claro y evidente cuando se comparan los Evangelios de Juan y de Tomás. Juan dice que podemos experimentar a Dios solo a través de la luz divina encarnada en Jesús, dice la profesora de religión de Princeton, Elaine Pagels. Pero ciertos pasajes del Evangelio de Tomás nos conducen a una conclusión muy diferente: que la luz divina del Jesús encarnado es compartida por toda la humanidad, dado que todos fuimos hechos a la imagen de Dios. En tanto que Juan enfatiza la resurrección como evidencia de la divinidad de Jesús, los escritores gnósticos tienden a visualizar ... la resurrección y otros elementos de la historia de Jesús, no como acontecimientos literales e históricos, sino como claves simbólicas para una comprensión "superior", dice el escritor religioso Jay Tolson. Además, la salvación ofrecida en el Evangelio de Tomás entra en conflicto con los relatos bíblicos. Mientras que la Biblia enfatiza que el perdón y la vida eterna están disponibles gratuitamente para cualquiera que los reciba con arrepentimiento y fe, según la perspectiva gnóstica, una persona tiene que ser digna de recibir la "sabiduría secreta" de Jesús, dice Ben Witherington III, del Seminario Teológico Asbury. Otra vez en contradicción con el Nuevo Testamento, Tomás cita a Jesús diciéndoles a sus discípulos: Si ustedes ayunan, atraerán el pecado sobre ustedes, y si oran, serán condenados, y si dan limosna, dañaran sus espíritus. y contrariamente a la descripción bíblica de Jesús elevando el estado desvalorizado de la mujer, Tomás lo cita enseñando que toda mujer que se hace varón entrará al reino de los cielos. El factor gnóstico puede encontrarse en el crecimiento de las enseñanzas y movimientos ocultistas y esotéricos, en los que el acceso a los secretos sobrenaturales está disponible a través de la iniciación individual y de la experiencia, más que a través de textos o doctrinas reveladas públicamente, dicen ellos.
Lee Strobel